El presente artículo describe la implantación de la energía geotérmica en el proceso de producción de vino y cava del Celler Batlle de Gramona, así como la aplicación de la climatización radiante para sus oficinas, y analiza los resultados energéticos y económicos obtenidos tras 6 años desde su puesta en marcha. 

Cavas Gramona es una empresa que elabora vinos y cavas desde el año 1881 y que destaca en el sector vitivinícola por la alta calidad de sus productos y por liderar la innovación en la viña y en la bodega. En 2001 Gramona inauguró el Celler Batlle, reflejo del compromiso de la empresa con la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente, y en 2012 reafirmó dicho compromiso optimizando y mejorando las instalaciones existentes gracias a la geotermia.

Concretamente, en junio del 2012 se sustituyó el sistema de generación de frío industrial convencional que utilizaba el proceso de vinificación de la uva por un sistema de generación basado en bombas de calor geotérmicas.

La Geotermia es la tecnología que aprovecha la energía almacenada debajo de la superficie de la tierra. El sistema ejecutado en el Celler Batlle se basa en la geotermia artificial de muy baja temperatura, que es aquella que utiliza la estabilidad térmica de los primeros 200 m del subsuelo para realizar el intercambio térmico y maximizar el rendimiento de los equipos de generación de frío y calor (bomba de calor geotérmica agua agua).

Para dar servicio a las necesidades de Cavas Gramona se implantó una instalación geotérmica con el siguiente diseño:

La instalación consta de dos bombas de calor geotérmicas de 40kw en frío que trabajan de forma escalonada hasta alcanzar la plena potencia de los cuatro compresores. De esta manera se puede adaptar la potencia producida en la demanda de cada periodo buscando siempre el régimen de máximo rendimiento de las máquinas.

Las bombas de calor actúan sobre dos depósitos de inercia, uno para la producción del agua fría y el otro para disipar el calor resultante de este proceso. Para el correcto funcionamiento del sistema es necesario mantener el depósito de agua caliente en un rango de temperaturas. Para ello se cuenta con un intercambiador geotérmico de 120 kW de potencia (20 perforaciones de 120 metros), que es capaz de disipar al suelo la energía sobrante de este depósito y mantener la estabilidad de temperaturas en el circuito frigorífico.

Desde el depósito de agua fría se da servicio a:

1. Frío industrial por el proceso de fermentación y conservación del mosto en las tinas.

2. Frío industrial por serpentín de pasta que enfría la uva que entra en la bodega.

3. Climatización de las oficinas y la sala de embotellar.

Desde el depósito de agua caliente:

1. Se entrega calefacción gratuita en invierno tanto en las oficinas mediante suelo radiante como en la sala de embotellado mediante fan-coil (se aprovecha el calor residual del proceso de generación de frío industrial).

2. Se disipa la energía calorífica sobrante hacia el intercambiador geotérmico.

La instalación descrita, basada en energía geotérmica de alta eficiencia, ha permitido satisfacer la potencia térmica necesaria para el proceso industrial de producción de cava, mejorando notablemente la eficiencia del sistema respecto a la instalación de aerotérmia antigua. Al mismo tiempo ha incrementado el ahorro energético gracias al aprovechamiento de la energía residual del proceso industrial para ofrecer gratuitamente la calefacción de las oficinas y de la sala de embotellado.

La puesta en marcha de la instalación geotérmica tuvo lugar durante los meses de junio y julio de 2012, entrando en funcionamiento durante la vendimia de ese año.

A continuación se presentan los ahorros anuales obtenidos gracias a la nueva instalación geotérmica a lo largo del periodo 2013–2018:

Se toma como base para la comparativa el consumo que hubiera tenido la instalación antigua de aerotermia bajo las condiciones climáticas y de producción reales del periodo 2013-2018.